Todo lo que allí había me arropaba con calor intenso y me sentía hermoso queriendo comer, para gozar de la nutridad de su sexo impiadoso.

pero que cruz hermosa!- escupía la muchedumbre
HERMOSA!: grito esa gente

miren lo que esta debajo se estremece y el héroe sabe que es lo que quiere!- Dijo el profeta que supo ver

y entre gritos en esta fiesta de carne escuche mi rosa:
este el gran héroe arrebatador, es el amante y de lo que esta debajo de la cruz nació el hijo
el hijo de dios y ya veras pasar su trono de hierro.
Que es la carroza que esta viniendo de engranajes y hierro chillon


ESE RUIDO


ESE RUIDO!

OTRA VEZ ESE RUIDO!
EL MALDITO RUIDO!

EL RUIDO DE EL LOCO
DE EL MUERTO
DE LA LUNA LLORANDO
QUE HORROR A MIS OÍDOS

SANGRE EN MIS OIDOS
SANGRE EN MI BOCA Y MIS MANOS
POR QUE!?

Observaba atónito cuanto dolor se avecinaba, el horror en su verdadera forma
De esqueletos estaba hecha su grandiosa corte y con flautas de piel dura, bailaban entre la gentuza que temía; Fuego vi salir de sus ojos, fuego negro, oscuro de humo color rojo. Miles eran ellos, mares cadavéricos con flautines y tambores festejando la venida de su gran maestro; Cerré los ojos no quierendo ver y sentí ese calor nuevamente el calor de aire viciado de aire gris mohoso y pestilente.
ese calor!
el calor que es rojo...
agobiante
que lastima

CALOR de fuego eterno que tapaba mi respiro y el humo se hacia mas negro que de hollin mi nariz tapaba.
Tan gris el cielo, lleno en oscuras humaredas de la santa carroza, tan lleno estaba que era carbon y esto era el comienzo.
Cuanto dolor sobre mi pecho, como una presión de mil toneladas de humo y fuego
Toda esa forma maldecia mis ojos de tan terrible espanto
Solo de chirriantes oxidados hierros y mecanismos en carne de hombre estaba hecho
En formas filosas y huesudas, sostenidas por serpientes; Serpientes que eran partes humanas de brazos y piernas unidos por piel en hierro fundido, pudiendo reconocer cada uno, hombres y mujeres por igual.
Vi su terrible tormento en su ultimo grito en cada rostro que formaba la serpiente dando gloria a la gran obra de el dios de la carne y sobre ellos solo hierro añejo como enjambre de metal de formas caidas y rotas.
miren que este fue su templo de brillantes luces de pirámides inconvexas de formas eternas y relojes. Ahora repta como un muerto podrido que antes era sol-oro y brillo eterno donde el viejo otrora ha transformado en herrumbre y lecho de Apophis.
Ante mi oxido y fuego de luz impura!
lo veo con miedo por tanto grito y pesadez de humo
Grito y ya no quise escuchar mas, solo desee el abrazo de el silencio y ser la triste rosa que todo lo sabe en su silenciar


Mi boca empezó a temblar y la multitud se estremecía de miedo.
Grandes estruendos! y miles de tambores seguían el gran trono y sobre el APOPHIS y su hijo en brazos
FUEGO
GOLPE
metal sobre metal



Quien es el gran simio?
hijo de el héroe arrebatador?
y de el reydios Apophis?
tan magná carroza! gloria de el fuego!
y las estrellas se apartaron para oir a dios en su reino:

MIRAD ES MI HIJO Y EL ES GRANDE!
MI GRANDE SIMIO!
MI GLORIA
MI HOMBRE
MI VERDADERO HOMBRE
GLORIA A MI
A MI!
A MI!

GRANDE COMO LOS QUE NACIERON DE LA MADRE LLOROSA
ARREBATADOR COMO EL HÉROE QUE ES TU PADRE
Y YO TU DIOS!
YO TU LECHE RICA!
TU LECHE QUE SERA TU CUERPO INTENSO

te has levantado sobre la nada
has sido creado en mi cruz
gran simio!
de palabras y palabritas no estas hecho
solo de las mías que son tu leche para tus huesos y tus músculos
que mañana romperán cristales de verdades sutiles
cristales de lindos colores
por que nada valen
solo vales tu que bebes mis leche y comes de mi
y serás grande

Ven
duérmete aquí
reposa junto a mi
solo escucha mi arrullo
mi bebe
sabes que yo nunca te haría daño
sabes que de mi saldrá leche dulce
y que te enseñare a desearla y pedir mas
por que eso eres, eres un pedir mas!

te amo, mi bebe
tu eres mi carne
y reemplazaras a todos y cada uno de mis avatares

NO!
no bebas de otros!
AY!
no lo hagas! que romperas mi corazon, si blasfemas
solo bebe de mi
que mi leche, para ti es dulce
que yo no soy el de las palabras o el de las palabritas
ni mucho menos el viejo ni la rosa silenciosa
y tampoco el profeta ni los de la luna

Soy tu dios padre!
y yo te doy mis carnes para que comas
mis carnes bellas que ahora son tuyas
ven come!
come cuanto puedas!
que todo lo que he hecho lo hice para ti

Que eres mi amanecer y serás forma bella en este metal en que ahora reposo
tu sabrás darme luces intensas
las luces de antaño
esas que ciegan al sol
las luces que me arrebato el viejo
y serán oro para todos los ojos

Llevando mi bendito nombre destruirás:
al profeta que nada dice y todo lo ve!
a la rosa que es silencio!
a la muchedumbre que todo sufre!
a los de la luna que todo lloran!
y al viejo que todo lo crea!

Grito Apophis y mientras el hablo todo fue silencio

Cuanto dolor dentro mío y ya mis ojos se cerraban de asco al ver tan nefasta figura de una larva sostenida entre los brazos de un hombre gris vestido de blanco que se deja ser mordisqueado con rabia sobre esa montaña de excremento, piel y hierro oxidado.
Cuanto dolor por saberlo eterno y por haber visto al viejo muerto.
Cuanto humo sobre mi y ese ruido que todo lo absorbe.
y ya nada podía gritar o suplicar.

la rosa sucumbio
en mi pecho supo morir
por que ya nada tenia que decir
y muerto mi corazon ya no sufrira